Este fin de semana tuvo lugar la celebración de las 24 horas de Nürburgring, donde la la marca súperdeportivo, el Bugatti Veyron, hizo su aparición en la carrera de resistencia más dura del mundo.
Más de 200.000 espectadroes a lo largo de este famoso circuito fueron testigos de un verdadero espectáculo justo antes del comienzo de la legendaria carrera. Dos Bugatti Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse encabezaron la lista de los 175 inscritos que compitieron en la carrera para dar una vuelta de honor.
Wolfgang Duerheimer, Presidente de Bugatti Automobiles SAS, se unió a la celebración y se puso tras el volante del Bugatti Veyron Vitesse de 1.200 CV que consiguió el récord mundial de velocidad con techo abierto de automóviles deportivos de producción con una velocidad máxima de 408,84 km/h (254,04 mph ) el año pasado.