«Después de tres intensas jornadas en pista, la verdad es que esperaba tener problemas con la muñeca derecha y ya esta mañana, en el warm up, he sentido algunos dolores que luego han sido mucho más intensos desde mitad de carrera y que me impedían controlar la moto como quería. En cualquier caso hemos dado el máximo de nuestras posibilidades en este primer fin de semana sobre la RS-GP y por eso lo considero positivo, pues hemos avanzado mucho sobre la moto y junto al equipo hemos logrado una buena puesta a punto a pesar del poco tiempo que hemos tenido», comentaba el piloto alemán.
«No estaba habituado a recorrer la distancia completa de carrera sobre esta moto y si a ello unimos mi estado físico, es evidente que no he podido ser todo lo rápido que me hubiera gustado, aunque por el momento me siento satisfecho y espero que en Brno podamos dar un paso importante adelante en todos los aspectos», finalizaba Stefan Bradl.
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