Cuatro carreras le quedan a Dani Pedrosa para no cerrar el año en blanco. Su casillero llevaba sin marcar un cero a estas alturas del calendario desde que debutó en 125 cc (2001). Primera y última, porque -con la tontería- llevamos 15 temporadas viéndole ganar al menos una carrera al año, para un total de 49 victorias en Grandes Premios. Ahora busca la 50, y faltan cuatro carreras.
La teoría dice que Dani Pedrosa y su Honda RC213V podrían ganar en cualquiera de esos cuatro circuitos. Repito: la teoría. En la práctica, ‘los cuatro fantásticos’ se quedaron en tres en Qatar. Dani salió de la escena sin saber siquiera si podría volver. Volvió, paso a paso, y ahora resulta que ha peleado un podio a Rossi como si él no se hubiera lesionado nunca y Valentino no hubiera ganado jamás. No hubo dolor, ni hubo respeto. Fue lo mejor del fin de semana. Sobre todo para Lorenzo. «Gracias Dani» dijo Jorge en rueda de prensa.
Van a hacer falta los tres mejores pilotos de MotoGP de nuestra historia para que Valentino pierda este Mundial
Esto nos lleva a otro de los paradigmas de la temporada, algo que cada vez parece más nítido: van a hacer falta los tres mejores pilotos de nuestra historia en MotoGP para que Valentino pierda este Mundial. Un italiano de 36 años contra tres españoles de 30 (Pedrosa), 28 (Lorenzo) y 22 (Márquez).
Por cierto, Marc es el que menos le sirve a Jorge, porque o gana o se cae. Es el único que por ahora, cuando la cosa negra está seca, le chupa la rueda y le moja la oreja a Lorenzo. Pedrosa no. Dani ha sido inocuo de momento para Jorge, y a también para Valentino, hasta esas últimas cuatro vueltas en Motorland.
Ese Dani, el de las seis esquivas y los seis directos al mentón de Rossi, puede ganar a cualquiera. Incluso a Márquez. Aunque Marc todavía no lo sabe. Pero ya puestos a que este sea el año de los desengaños para el #93, quizá le venga todo junto y ahora también descubra que ni Rossi es tan simpático, ni Lorenzo tan lento, ni la Honda tan buena, ni Pedrosa tan manso… Cuatro cuatro carreras quedan para que se entere.
Ahora sí que tenemos a cuatro tíos para intentar ganarlas. En esta tesitura, no hay duda de que Dani será juez del campeonato sin estar obligado a ganar (nota mental para los apostadores: Dani puede dar pasta). Ha llegado tarde pero ha llegado a tiempo. Tiene de plazo hasta la última curva en Cheste y, teniendo en cuenta su progresión en esta segunda mitad del año, y que es el piloto con más victorias en Valencia, amenaza que sea allí, el ‘Día D’ a la ‘Hora H’, donde Dani gane su única carrera en todo el año. Una gran traca final para Valencia, como debe ser.
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