Habían pasado solo unos días desde que se levantase el confinamiento en el verano de 2020, cuando Mitsubishi nos pegó uno de los sustos del año anunciando que se retiraba del mercado europeo después de cuatro décadas. La cosa se podía ver venir, porque las cifras eran las que eran. En ese momento, además, la cosa iba en caída libre en todo el mundo y, a fin de cuentas, no todos los fabricantes tienen capacidad y cintura para seguir los volantazos que va dando el mercado en los últimos tiempos. Pero por previsible, la cosa no dejaba de ser menos grave teniendo en cuenta que se trata de una marca con un importante poso gracias a que ha tenido sagas icónicas como la del Montero o L200, una absoluta leyenda como el Lancer Evo (con 10 generaciones) e incluso coches con cierto ‘carisma’ como los Eclipse y 3000 GT.

Sin olvidarnos de que es la marca con más victorias absolutas en el Dakar (12 entre 1985 y 2007) y que guarda en sus vitrinas 4 títulos de Campeones del Mundo de Rallyes de pilotos y uno de constructores, con el inolvidable Evo de Tommi Mäkinen. Por no hablar de los miles de triunfos que sus coches han cosechado en manos de pilotos privados por todo el mundo. Pero Mitsubishi es un grupo industrial gigantesco: fabrican desde aires acondicionados domésticos hasta tanques y misiles para el ejército japonés, pasando por carretillas elevadoras y satélites; y no es descabellado que, en un cierre fiscal, alguien revise números y proponga eliminar aquellas partidas que salgan rojo. Algo así tuvo que ser lo que pasó en aquel verano de la pandemia. Pero cuando hablamos del ocaso de una marca, no todas hacen el mismo ruido al caer ni, por supuesto, dejan el mismo eco. Por eso he querido arrancar esta prueba recordando que la fuerza de una marca es un intangible que va más allá de las cifras de matriculaciones y que es capaz de salvar un moribundo libro de cuentas.

Afortunadamente, la situación se recondujo unos meses después. Como socio de la alianza de Renault y Nissan desde el año 2017, entre europeos y nipones encontraron una solución viable para salvar la situación: aprovechar dos productos que Renault ya tenía amortizados para mantener modelos competitivos en los segmentos más importantes, sin necesidad de la cuantiosa inversión que ello conlleva.

El primero de estos ‘nuevos’ lanzamientos es este Mitsubishi ASX, fabricado sobre la base del Captur en la planta de Renault en Valladolid. El segundo es el nuevo Colt, hecho sobre el Clio. Gracias a ello, Mitsubishi recupera la competitividad con dos buenos coches, bien fabricados (además, hacerlo en España facilita plazos de entrega), fiables y con gamas bien armadas alrededor de los motores con mayor demanda en estos momentos: híbridos y microhíbridos. Mientras que Renault puede mantener la capacidad productiva de su fábrica sin acumular un stock inmanejable bajo su marca.

Diseño Mitsubishi ASX PHEV

Dicho esto, salta a la vista que el nuevo Mitsubishi ASX solo comparte el nombre con la anterior generación del modelo, el cual, de hecho, estaba emparentado con los Peugeot 4008 y Citroën C4 Aircross por el acuerdo con PSA de aquel momento. Este se parece a un Captur y es un Captur (el Nissan Juke también usa la misma plataforma, aunque estéticamente no tenga similitud). Por lo tanto es un SUV urbano con 4,2 metros de longitud, 1,79 de anchura y 1,57 de altura que ofrece un espacio interior correcto y un maletero que va desde los 422 litros de las versiones de gasolina hasta los 375 en el caso de este PHEV, debido al espacio que ocupan la batería y otros elementos del sistema eléctrico.  

Motor Mitsubishi ASX PHEV

Esta versión híbrida enchufable monta un motor atmosférico de cuatro cilindros y 1.6 litros que, unido a motor eléctrico de 67 CV, rinden una potencia conjunta de 160 CV.  Esta mecánica tiene una buena respuesta en aceleración y también en recuperación, aunque el salto de desarrollo de la caja de cambios de convertidor de par es un poco brusco cuando aceleramos al máximo. En vías rápidas se defiende bien a velocidad legal, pero puede llegar a sufrir un poco cuando le exigimos ritmos altos en subida a plena carga de pasajeros y equipaje. En esas condiciones de máximo esfuerzo, el cambio no termina de gestionar bien la potencia, tarda en bajar el desarrollo para compensar el desnivel y, cuando lo hace, necesita subir mucho de vueltas para mantener o ganar velocidad. Es un coche bastante silencioso, tanto por mecánica como por el buen aislamiento del habitáculo. La dirección y las suspensiones son cómodas para el día a día. Resultan un poco blandas si pasamos rápido por baches o badenes, en los que se puede llegar a notar el tope del amortiguador. No hay pretensiones de deportividad, pero tampoco son necesarias en un coche de estas características.

Consumo y autonomía Mitsubishi ASX PHEV

El nuevo Mistubishi ASX híbrido enchufable lleva una batería de iones de litio de 10,5 kWh que tiene homologada una autonomía eléctrica de 49 kilómetros que le permite llevar etiqueta CERO. En condiciones reales y haciendo diferentes tipos de conducción durante la prueba, la autonomía eléctrica rondó los 30 kilómetros aunque, bien gestionada, se pueden hacer unos 40 kilómetros. Como ocurre con la mayoría de híbridos enchufables, su mejor baza está en la combinación de ambos mundos, y si nos limitamos a hacer una conducción simplemente normal y dejamos que sea el coche quien gestione la energía de la forma más eficiente posible, podemos llegar a conseguir consumos reales de unos 3,5 litros a los 100 km, siempre que la batería arranque el recorrido diario cargada (tarda unas 3 horas en un cargador doméstico). De hecho, me ha sorprendido para bien la eficiencia del sistema en carretera, donde se pueden hacer unos 500 kilómetros entre repostajes con facilidad.

Interior y equipamiento Mitsubishi ASX PHEV

En el interior del Mitsubishi ASX ocurre lo mismo que en el exterior y volvemos a reconocer claramente al Renault Captur a partir del que se fabrica. Esta unidad lleva el acabado más alto de la gama, el llamado Kaiteki+, por lo que cuenta con todo el equipamiento disponible para el modelo. Esto incluye un cuadro de mandos 100% digital de 10 pulgadas y una pantalla multimedia táctil de 9,3 pulgadas en formato vertical y que destaca por un funcionamiento muy sencillo, buena calidad de imagen y capacidad de personalización de los menús. Es un interior cómodo y bien terminado. El salpicadero tiene un paño superior de plástico que ofrece un tacto gomoso bastante bueno y, en general, los materiales empleados en zonas de contacto como volante, pomo, palancas y botones y apoyabrazos es confortable. Los asientos son cómodos y sujetan bien. Detrás hay buen espacio para las piernas y para la cabeza, pero el acceso a las plazas traseras queda un poco bajo y resulta incómodo en algunas situaciones o para algunas personas. La tapicería de cuero de este acabado es cómoda. Incluso en lo más extremo del verano no me resultó calurosa. Este acabado también incorpora un techo solar que queda separado del habitáculo con una cortinilla perforada que deja pasar bastante luz al interior lo que obligó a llevar el climatizador a plena potencia en las horas centrales del día.

Valoración Mitsubishi ASX PHEV

PUNTOS FUERTES

  • Confort de marcha
  • Mecánica eficiente
  • Sensación de calidad interior

PUNTOS DÉBILES

  • Respuesta del cambio en aceleración
  • Acceso a las plazas traseras
  • Cortinilla perforada del techo solar

LA OPINIÓN FINAL. Es cierto que el nuevo Mitsubishi ASX no ofrece nada nuevo, empezando por su imagen exterior, ya vista en otro coche de otra marca, y siguiendo por motores y tecnología que también son heredados. Pero con él, el fabricante japonés tiene un producto completo, fiable y bien hecho que, además se beneficia de las ventajas de haberse ahorrado el desarrollo previo y de ser fabricado en España. Todo esto permite a la marca contar en su gama con las versiones más demandadas desde el inicio y jugar con una interesante política de precios para compensar la posible falta de novedad. Con los descuentos que tiene en promoción es una de las compras más razonables dentro de su segmento.

Ficha técnica del Mitsubishi ASX 160 PHEV

Tipo de motorHíbrido enchufable, gasolina, 4 cilindros, atmosférico
Cilindrada1.598 cc
Potencia160 CV
Par máximoN.d.
Vel. máxima170 km/h
Aceleración (0-100 km/h)10,1 s
Consumo (litros /100 km)1,4 l.
Medidas (L/A/AL)4.228 / 1.797 / 1.573 mm
Neumáticos215/55 R18
Peso en vacío1.616 kg
Maletero375 l
Precio38.390 €
Gama desde23.490 €
LanzamientoFebrero 2023

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