Para el Equipo Porsche ha empezado la etapa final de su preparación de cara al Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC por sus siglas en inglés). La escudería probó su Porsche 919 Hybrid de nuevo desarrollo, inscrito en la categoría superior de los Prototipos Le Mans, durante tres días (24-26 de marzo) en el Circuito de Paul Ricard, situado al sur de Francia.

Por primera vez, el innovador coche de competición LMP1 híbrido ha aparecido con su decoración final en una pista de carreras. Los gráficos del diseño muestran las primeras letras que utiliza Porsche como lema en el mercado “Porsche Intelligent Performance” (“Prestaciones Inteligentes de Porsche”). El viernes, en Paul Ricard, comienza el Prólogo del WEC, la primera reunión de todos los vehículos del Campeonato del Mundo, que es esperada con gran entusiasmo.

Durante el test exclusivo de Porsche sobre los 5.791 kilómetros de longitud de la pista, estuvieron presentes los seis pilotos oficiales del LMP1. Las dos alineaciones de pilotos, Romain Dumas/Neel Jani/Marc Lieb (coche número 14) y Timo Bernhard/Brendon Hartley/Mark Webber (coche número 20) completaron un amplio programa de pruebas. Dicho programa fue interrumpido varias veces debido a problemas técnicos pero, aún así, las pruebas resultaron muy productivas, incluyendo las tandas de noche y los incontables ensayos de pit stop.

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A pesar de los fuertes y fríos vientos Mistral que hubo a principios de semana en el circuito, que está a 470 metros sobre el nivel del mar, el equipo disfrutó de unas excelentes condiciones para probar. Con unas temperaturas ambiente que iban desde los cuatro grados centígrados de la noche hasta los 12 a los que se llegaba durante el día (temperaturas de pista de 4 a 23°C), el circuito estuvo seco, a excepción de una ligera llovizna nocturna en una ocasión. Entre los dos Porsche 919 Hybrid cubrieron una distancia de 4.756 kilómetros.

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Andreas Seidl, jefe del equipo: “Este test ha sido un reto muy importante para todos los componentes de la escudería. Por primera vez estuvimos haciendo rodar dos coches al mismo tiempo, lo que es bastante exigente en términos de logística y coordinación del equipo. El otro objetivo era simular un fin de semana de competición, para prepararnos de cara a las dos carreras de seis horas próximas. Ha sido una experiencia muy importante para nosotros. Las pruebas nos han enseñado que tenemos que mejorar en cuanto a fiabilidad. En lo que se refiere a la forma en que los técnicos y los pilotos han trabajado juntos como un equipo, vamos en la dirección correcta. Los próximos dos días de pruebas aquí, en Paul Ricard, durante el Prólogo, los utilizaremos para afinar la puesta a punto de ambos, así como a preparar los procesos específicos para carrera”.

Después del Prólogo, los test de los días 28 y 29 de marzo compartidos por todos los inscritos en el WEC, tendrá lugar la primera prueba del Campeonato del Mundo el 20 de abril, las 6 Horas de Silverstone (Gran Bretaña).

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